Hector Spector

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Hector Spector

Ya amanece en Darktown y a Hector Spector le va a costar olvidar esta noche.  El sabueso ha pasado toda la noche deambulando por los bajos fondos de la ciudad, donde la chusma de la peor calaña habita. Una noche llena de tramposos ambiciosos, de sucias mentiras, de injusticias y traiciones.

Todo empezó hace dos días, cuando la señora Badvibes, Nancy Badvibes, fue a visitar a Spector, a la oficina que  tiene en el 13 de Failures Boulevard, a la altura del Disastrous Coffee, justo haciendo esquina con Awful Avenue.

Nada hizo sospechar a Spector que Nancy Badvibes sería la causa de la cadena de terribles acontecimientos que sucedieron en los dos días siguientes. La historia que le contó Nancy en definitiva era como cualquiera otra de las que tenía que oír todos los días.

Su marido era un alcohólico empedernido que desahogaba su frustración a golpes en las carnes de su mujer, Nancy. Estaba endeudado hasta las cejas con la mafia por apuestas absurdas en todo tipo de juegos. Lo normal.

El problema de Nancy es que había descubierto que los calzoncillos de su marido Clark, el señor Badvibes, olían a pescado más que lo de costumbre y tenían unas manchas rojizas a la altura de la punta de,… bueno, ahí. Nancy necesitaba saber la verdad. Le dio 5 000 dólares a Spector y le pidió que averiguara las andanzas de Clark.

 A Spector esa historia le sonaba de lo más normal: Clark zurra a Nancy, Nancy no le da lo que él quiere y Clark va en busca de consuelo a los sitios en los que los hombres casados suelen encontrar consuelo. Un caso fácil. Pan comido… Pero no, esta no es esa historia.

No había nada que le hiciera sospechar las horribles cosas que sucederían más tarde… (continuará)

Escribe en un comentario si conoces algún otro sabueso como Hector Spector. Recomienda esta entrada a alguien que sea fan de la novela gráfica negra. Dale al “megustas” y guarda esta entrada en tus colecciones de cosas “nohayningundetectivecomohectorspector”.

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C./

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