No hay nada como el pollo asado. Una receta fácil de hacer, económica y que gusta a la gran mayoría. Se suele comer con ensalada, patatas, pan y, por supuesto, un buen vaso de vino cosechero. Algunas personas desahogadas economicamente le ponen un poco de gaseosa al vino. Es un auténtico lujo que todos deberíamos permitirnos al menos una vez en la vida.
Sobre este punto os prometo que haré una entrada presentando las mejores gaseosas, con cata y degustación, detallando el envasado y el origen del gas carbónico utilizado. De verdad. Ahora centrémonos solo en el pollo. La receta del pollo asado es muy sencilla. Ahí va.
Tomad nota de los ingredientes: un pollo (animal, no de los otros).
Necesitaréis adicionalmente un horno, con su bandeja. Para condimentarlo usaréis sal. Los financieramente independientes podéis poner un poco de AOVE (ahora os vendo enciclopedias), pimienta inclusiva (de todos los colores), orégano, ajo y perejil.
El modo de preparación es el siguiente: lava el pollo, ponle sal y mételo en el horno durante 1 hora a 180 ºC.
Insisto en que toméis nota de la receta y la tengáis a mano en el momento de hacer el pollo asado, que luego vienen los “ays”: “¡ay, se me olvidó la sal!”, “¡ay, se me olvidó el horno!” “¡ay, si no compré el pollo!”… y así podría seguir una semana.
Me anticipo y respondo a algunas preguntas frecuentes que soléis hacer:
- El pollo asado se hace con pollo, y no, no se puede sustituir por verduritas.
- Si no tienes ni horno ni fogones no puedes hacer pollo asado.
- No, no voy a prestaros dinero.
Escribe en un comentario si te gusta el pollo asado con ensalada y patatas. Recomienda este post a algún “cocinillas” que le gusten las buenas recetas. Dale al “megustas” y guarda este post en tus colecciones de cosas “c./esungrancocinero”.
¡Un momento! Escribe en un comentario si has buscado en Internet que el pollo asado es una receta ancestral de cavernícolas (¡seguro que lo has hecho!)
C./